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Taller literario

¿Cómo escribir el conflicto de mi historia?

La importancia del conflicto:

Toda historia, no importa si se trata de un cuento, novela, fábula o guión se caracteriza porque debe de incluir un conflicto, de lo contrario no será lo suficientemente buena, y es que no importará mucho si tiene buenos personajes o un gran worldbuilding, puesto que lo que caracteriza a una buena propuesta en la historia es aquella que se alimenta en el conflicto, que se desenvuelve en el explosivo desastre, pues sólo así tiene la oportunidad de capturar la atención del lector o espectador hasta el final y de transmitir un mensaje. 

Tenemos que ser sinceros, nos guste o no como seres humanos somos seres entrometidos y nos metemos donde no nos llaman aunque no nos incumba, queremos saber sobre acontecimientos que no nos afectan directamente, pues nuestra curiosidad nos doblega cuando se trata de drama, y es que también somos muy dramáticos, nos la pasamos haciendo dramas por todo, y por supuesto no podemos dejar de prestar atención a los dramas de las personas que nos rodean.

Y claro está, también nos sumergimos en los dramas de personas inexistentes, sólo piénsalo, cuántos libros, cuentos, fábulas, mitos, leyendas, películas, videojuegos no has consumido en los que los personajes tienen uno o más problemas que resolver, ¿No te parece que son los problemas y el drama lo que hace interesante una historia? ¿Lo que capta nuestra atención?

De ahí la importancia del conflicto, a los seres humanos nos aburre leer un libro o ver una película en la que nada pase, donde los personajes sean perfectos, tengan vidas perfectas y no se vean afligidos por ningún problema en lo absoluto, nosotros nos emocionamos con todo lo contrario, queremos ver cómo los problemas explotan, queremos contemplar desastres, interesarnos en el conflicto, fascinarnos por el caos.

O tal vez nos atrae porque sería demasiado insoportable para nosotros, personas que vivimos rodeadas de problemas todos los días, ver la historia de alguien que no tiene ninguno, ya que al no reflejarnos en el personaje, no podemos desarrollar empatía hacia este, ni mucho menos interés, lo que sería como tener una utopía de una vida humana en la que ninguno de nosotros nos interesamos. 

Tipos de conflicto:

Son muchas las cosas que pueden ser categorizadas cuando se trata de historias, una de ellas es el conflicto, ya que al igual que los problemas son diversos y pueden adoptar muchas formas, pueden ser conflictos grandes o pequeños, cortos, o prolongados, así como tener numerosas causas y soluciones posibles, claro está, mientras más le cueste al personaje alcanzar una de esas soluciones, más realista y orgánico se sentirá, del mismo modo también puede implicar más emoción. A continuación te presentaré una pequeña categorización que hice de los conflictos que puedes incluir en tu historia. 

Conflicto relacionado con el worldbuilding:

¿Alguna vez has apilado piezas de dominó sólo para tirar la de un extremo y hacer que todas las demás se caigan también? ¿No te gusta ese efecto dominó? Comienzas por acomodar las piezas sobre la mesa, colocándolas en la posición perfecta y asegurándote de que no estén ni muy juntas ni muy separadas, tal vez incluso dibujas una figura con el camino que recorren las piezas, luego cuando todo se ve perfecto tiras la primer pieza y derribas todas las demás en un instante. ¿No es divertido verlas caer?

Bueno, ahora imagina, que colocar las piezas sobre la mesa es hacer tu worldbuilding, pero tu worldbuilding tiene una falla, esa falla es la pieza que tiras después para crear ese efecto dominó, supongamos que sólo tú conoces la ubicación de esa pieza y sólo tú puedes hacerla caer, pero si se cae todo tu worldbuilding muere.

Tal vez ya no sientas tanta emoción de hacer ese efecto dominó, pues te tengo buenas noticias, tienes a un montón de personajes que trabajarán para ti para evitar que esa pieza se caiga, ahí tienes tu conflicto. Te lo acabo de plantear con esta analogía porque me pareció que podíamos explicar este tipo de conflicto tan complejo de la forma más sencilla del mundo.

Cuando quieras trabajar con este tipo de conflicto sólo recuerda que es tan simple como jugar con piezas de dominó: Primero haz tu worldbuilding, coloca una falla secreta, algo que pueda hacer colapsar tu mundo, ya sea en el ámbito social, político, económico, o simplemente provoque una destrucción total de tu mundo; luego plantea posibles soluciones; coloca a tus personajes en un contexto en el cual les des a conocer dichas soluciones, y deja que ellos hagan el resto, ellos se asegurarán de que la historia se vaya contando de forma interesante y emocionante mientras intentan resolver el conflicto que les diste.

Conflicto relacionado con el protagonista:

Pasemos a los conflictos que involucran a los personajes, en este caso también podríamos aplicar la analogía del efecto dominó: Poner una falla que pueda colapsar la vida de tu personaje (en cualquier aspecto que se te ocurra), plantear soluciones posibles, contextualizar al personaje para que las conozca, y posteriormente dejarle el trabajo de solucionar el conflicto que le planteaste. Esto si lo ponemos de forma muy simple.

Otra forma en la que puedes abordar un conflicto relacionado con tu protagonista, es simplemente hacerte la pregunta ¿Qué problema le voy a dar? Es simple, estamos familiarizados con los problemas, después de todo los hemos tenido por montones durante toda la vida, así que sólo piensa en algún problema que te llame la atención ver cómo se resuelve, puedes tomar inspiración de problemas que hayas experimentado, o visto a otros experimentar (en cuyos casos puedes adaptarlos o dejarlos igual a cómo ocurrieron en la vida real) o simplemente inventarlos, y ver a dónde lleva a tus personajes. 

Conflicto relacionado con el antagonista o villano:

Este es un tipo de conflicto muy interesante, ya que aquí no hablamos de qué genera el conflicto, sino de quién, y cuando la causa del conflicto que tus personajes tienen que resolver es otro personaje, puede ser aún más emocionante porque tendrás que dejar que tu antagonista o villano sea él/ella mismo(a) y luche por hacer que el conflicto permanezca o empeore mientras que tus otros personajes intentan evitarlo, lo cual se podría ver como una carrera por quién logra arruinar o resolver las cosas primero. 

El conflicto relacionado con el antagonista o villano también puede estar conectado a un conflicto de worldbuilding, en este caso imagina que la pieza que provoca el efecto de dominó que hace colapsar a tu mundo es el personaje antagónico o el villano en sí. De modo que tus personajes tendrán que arreglar el problema, ya sea impidiéndole al antagonista o villano de hacer colapsar al mundo, o deteniéndolo y corrigiendo el daño causado en caso de que ya lo haya hecho. 

El conflicto principal y los conflictos secundarios:

A lo largo de nuestras vidas nos hemos topado con problemas que han tenido diversas duraciones, a veces duró unas horas, otras veces duró meses o años hasta que finalmente se resolvió, y si recordamos nuestros problemas está claro que recordaremos como problemas grandes a aquellos que duraron mucho y como problemas pequeños a aquellos que duraron poco, bueno, lo mismo pasa en las historias ficticias.

Cuando trabajes una historia puedes generar los conflictos como una serie de problemas, en donde tus personajes resuelven un problema, y luego tienen otro que resolver, lo resuelven, llega uno nuevo, y así sucesivamente. Imagina que tus personajes tienen un problema grande que resuelven hasta el final de la historia, y también otros problemas más pequeños que van resolviendo en el camino que recorren antes de llegar al final.

En este caso estaríamos hablando de un conflicto principal (el problema grande que se resuelve al final), y un conjunto de conflictos secundarios (los problemas pequeños que se resuelven durante la historia), a decir verdad la gran mayoría de historias manejan la fórmula anterior, en vez de simplemente poner un único conflicto, al final del día depende de ti de cómo lo quieras manejar, pero toma en cuenta de que conflictos secundarios ayudan a mantener el interés del lector o espectador, especialmente cuando se trata de historias más extensas donde el conflicto principal toma más tiempo en resolverse. 

Conclusión:

El conflicto es importante porque va a ser el gancho que haga que tu lector o espectador siga tu historia hasta el final, ya que no sólo genera el drama y la emoción que atrae a los humanos como abejas a la miel, sino que también le da propósitos a tus personajes y hace que sea más fácil conectar con ellos, puesto que les estás dando una meta que consiste en superar uno o varios obstáculos para lograr algo, lo cual no es sólo interesante, sino que también puede resultar inspirador, y lo puedes aprovechar también para enseñar muchas cosas a través de tu historia, así que disfruta tu proceso de crear y resolver conflictos, podrá resultar laborioso y agotador a veces, pero ayudará mucho a tu historia y a las personas que más tarde la terminarán consumiendo. 

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¿Cómo sobrevivir a la automutilación?

Oigo voces que me dicen que me autolesione ¿Qué debería de hacer?

Introducción:

No recuerdo la primera vez que escuché voces en mi cabeza, sospecho que tal vez comenzaron desde que era niña, pero no me di cuenta de que fuera algo anormal ni lo vi cómo algo malo hasta los catorce años, fue a partir de aquel momento cuando descubrí su sádica naturaleza con la que me causarían dolor:

Recuerdo claramente ese día, iba en caída libre por el pozo de la depresión, la lenta gravedad hacía su trabajo y me atraía hacia esa agua salada en la que me ahogaría, ¿O tal vez ya me había ahogado? Sentía que ya estaba muerta por dentro, que era una muerta viviente, un fantasma en el mundo de los vivos, cargando la pena y la vergüenza de ser yo sobre el rostro, cuando de repente esa voz apareció, soy incapaz de describir el tono o la textura de las voces, o su forma de hablar siquiera, pues sólo recuerdo las emociones y sentimientos horribles que me inyectaban por los oídos. 

Pero lo que recuerdo vívidamente es la frialdad y miedo en los que me bañó el alma al hablar, al pronunciar esa única palabra de tres sílabas que me produjo un escalofrío intenso a lo largo de mi columna vertebral. Iba caminando cuando esa voz me paralizó de pies a cabeza, como si tuviera control sobre mi cuerpo, tal vez sí lo tenía, y sólo con la palabra: “¡Córtate!” fue que su tortura comenzó.

Me imagino que tú también tienes tu propia historia acerca de cómo comenzaste a oír voces, y esa primera vez en la que te dijeron que te hicieras daño a ti mismo(a), créeme, tengo una idea del miedo y el sufrimiento que pudiste haber experimentado, tal vez aún lo experimentas, tal vez las voces de tu cabeza no se callan y siguen presionándote para que te lastimes, es probable que incluso las estés escuchando ahora mismo.   

En mi propia relación con las voces, ellas eran las dominantes y yo era la sumisa, tenía que dirigir mis pensamientos, sentimientos, y acciones hacia lo que las voces me indicaran para satisfacer sus deseos, siempre que intentaba oponerme a ellas perdía, y me resignaba a mi sumisión, solía pensar que nunca se irían ni se callarían, que estarían conmigo para siempre, y que tendría que aguantar las consecuencias tanto de obedecerlas como de desafiarlas y hacer lo que yo quisiera, en cualquiera de los dos casos se podría decir que yo perdía.

Tal vez la relación que tienes con las voces en su cabeza es similar, bueno, si ese es el caso me gustaría aconsejarte para que logres que el desafiarlas no sea un castigo después de todo, quiero ayudarte a que descubras que no tienes porqué ser y hacer lo que las voces quieran, y sobre todo que no tienes que autolesionarte sólo porque ellas lo dicen. 

Sé que tienes miedo de esas voces, sé que se sienten reales, que lo que dicen tiene sentido para ti, y que parece que te puede ir peor si intentas deshacerte de ellas, incluso podrían estarte diciendo que no leas esto, y si te lo dijeron, significa que tienen miedo de que descubras cómo librarte de ellas, y es que nosotros tenemos un miedo atroz de las voces, pero son ellas las que deberían de estar aterradas de nosotros, pues sin nosotros ellas no son nada, pero nosotros sin ellas sí somos muchas cosas. 

Entiende que las voces te están mintiendo:

¿De dónde provienen las voces? Después de siete años de aguantarlas finalmente fui al psiquiatra, y en una ocasión la psiquiatra me explicó que podían generarse como producto de la depresión o de algún desequilibrio emocional. Si lo pensamos podemos ver que el lado positivo es que ambos casos son problemas que pueden resolverse (aunque no lo parezca porque la depresión se siente como caer en un agujero negro donde los papeles del tiempo y la distancia se invierten y parece que caes por toda la eternidad, y nuestras emociones parecen un caso perdido e irremediable), ya que como seres humanos somos seres en constante cambio, nuestras emociones y sentimientos pueden cambiar, nuestro contexto puede cambiar, por lo que es ilógico que la tristeza dure para siempre, o los desequilibrios emocionales permanezcan sin arreglarse. 

Entonces cuando las voces te dicen que mereces la autolesión y que tienes que hacerte daño, probablemente les crees porque te hacen sentir que no tienes otra salida, que como ellas son eternas y nunca te dejarán en paz, debes de obedecerlas, pero como mencioné anteriormente, se pueden corregir las causas de dichas voces, aunque te cueste trabajo creerlo, existen maneras de dejar de escuchar voces, e incluso si las escuchas en este momento, ellas te dicen mentiras que tú no tienes por qué creer. 

Te pondré de ejemplo una de las mentiras que me dijeron a mí mis voces: Solían decirme que no le podía decir a nadie de su existencia, porque me iba a ir muy mal, ellas me iban a castigar, las personas pensarían que era una loca, una esquizofrénica, que terminarían mandándome al psiquiatra quien me daría medicamentos para dejarlas de escuchar, pero que no funcionarían porque ellas nunca se despegarían de mí, y estarían conmigo para toda la eternidad. 

Ahora que lo pienso no puedo creer que haya sido tan ingenua para creerles, resultó que me estaban mintiendo, porque en menos de un mes de tomarme solo un gramo de risperidona al día que me dio la psiquiatra yo ya no las podía escuchar en lo absoluto, y si me mintieron al decirme que no me podía librar de ellas, ¿Tú crees que no me mintieron en todo lo demás, como que merecía un castigo, que tenía que hacerme daño?

Algo que necesitas entender es que las voces son falsas y mentirosas, y sí podrás decirme: Pero se sienten reales para mí, y tienes razón ¡Claro que se sienten reales!, pero una cosa es sentir y otra cosa es ser, y no porque las sientas reales significa que lo son. Las voces quieren que las sientas reales, porque sólo así tienen control sobre ti, solemos someternos a ellas y creernos todo lo que dicen, pero lo que realmente debemos hacer cuando las oímos es analizar objetivamente todas y cada una de sus palabras, sólo así descubriremos sus mentiras, y al descubrirlas nos acercaremos más a librarnos de su control.

Así que la próxima vez que te digan que debes autolesionarte pregúntate: ¿Por qué me dicen esto? ¿Por qué dicen que tengo que hacerme daño a mí mismo? Debo advertirte que no te gustarán las respuestas, porque lo más seguro es que sean críticas destructivas contra tu persona, insultos y palabras hirientes, pero es importante que tomes en cuenta estas respuestas para que veas que las voces lo único que buscan es dañarte: Harán cualquier cosa para hacerte sentir mal, dirán cosas malas e hirientes sobre ti, te resaltarán tus defectos, los exagerarán  o simplemente los inventarán, y lo único que te dirán al final del día son mentiras. Y si las voces te mienten en todo lo que dicen ¿Por qué sigues creyéndoles? 

Deja de hacer lo que las voces te digan:

Tú eres una persona maravillosa y especial, sin importar lo que las voces te digan, no son ciertas las cosas horribles que te dicen, y sobre todo no es cierto que mereces alguna clase de castigo, ni que deberías de hacerte daño a ti mismo(a). Mereces ser libre de pensar, sentir y hacer lo que tú quieras sin preocuparte cómo lo tomarán las voces, y sin importar lo que ellas te hagan sentir tienes que recordar que ellas no existen, son sólo voces de las cuales te puedes librar si las enfrentas y pides ayuda, no es verdad que te harán daño, de hecho el único modo en el que te pueden dañar es si les dejas tener el control sobre ti, así que no se los des, no te creas todo lo que te dicen, y no se te ocurra hacerte daño a ti mismo(a) sólo porque una voz malvada en tu cabeza te lo dijo. 

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¿Cómo ayudar a un suicida?

Tengo prejuicios sobre el suicidio ¿Qué debería de hacer?

¿Qué son los prejuicios?

El prejuicio es una manifestación de la superficialidad humana, y es que nos guste o no, todos somos superficiales hasta cierto punto, nos dejamos llevar por las apariencias y primeras impresiones que tenemos sobre las cosas que nos encontramos en nuestro día a día. Para comprender mejor la influencia que dicho fenómeno tiene en nosotros, vale la pena analizar el mecanismo mediante el cual concebimos el prejuicio y reaccionamos ante este: 

Para empezar partimos de nuestro sistema de creencias, pero ¿Qué es un sistema de creencias? Se trata de una red de ideas preestablecidas, las cuales componen nuestra mentalidad, cabe mencionar que existen dos tipos de sistemas de creencias: El individual, y el colectivo.

Comencemos por el sistema de creencias individual, este es un conjunto de ideas determinadas que provienen del sujeto, es decir, son creencias personales, conclusiones alcanzadas de forma individual; por el contrario, el sistema de creencias colectivo, es aquel que proviene de un conjunto de personas, o de una sociedad, por lo tanto son conclusiones compartidas, ideas transmitidas y aprendidas de un individuo a otro. 

Tanto en los sistemas de creencias individuales como colectivos puede darse un fenómeno llamado prejuicio, el prejuicio es una de las ideas de nuestro sistema de creencias, la cual es superficial y banal, puesto que no analiza, y no pretende profundizar en aquello a lo cual se refiere, ya que no le interesa entenderlo. En palabras más sencillas, tener un prejuicio, es juzgar sin antes conocer.

¿Cómo reaccionamos a los prejuicios?

Anteriormente mencioné que todos somos superficiales, y si todos somos superficiales, entonces todos tenemos nuestros prejuicios, y si es tan normal ¿Cuál es el problema de tenerlos? Bueno, ya que normal no es sinónimo de positivo, la respuesta a esa pregunta es que el prejuicio nos conduce a la ignorancia y a actuar de formas en las que normalmente no actuaríamos de tener conocimiento, lo cual no suele resultar muy bien.

Hay que considerar que tener prejuicios limita nuestra capacidad de ver la realidad, es como tener una manzana, pero verla como una naranja, tal percepción se vuelve un problema porque implica la confusión de dos frutas que son completamente diferentes en todas sus características: Apariencia, textura, olor, y sabor. 

Claro que los prejuicios pueden causar problemas mucho más grandes que el de la confusión de dos frutas, ya que los prejuicios pueden ser ideas acerca de temas más serios y/o sensibles, capaces de llevarnos a actuar de formas más problemáticas que nos afecten negativamente a nosotros mismos, o en los peores casos, a las demás personas. 

El peligro de los prejuicios sobre el suicidio:

Ya que los prejuicios son producto de un sistema de creencias colectivo o individual, dichos prejuicios pueden abordar prácticamente cualquier tema existente, es decir, podemos tener prejuicios sobre cualquier cosa, y una de esas cosas es el suicidio. Ejemplos de tales prejuicios sería ver a un suicida y tener pensamientos como: Sólo quiere llamar la atención, es una persona débil, cobarde, o exagerada, entre muchas otras. Y cómo con todos los demás prejuicios, tener esta clase de pensamientos nos aíslan en la sombra de la ignorancia, privándonos de ver la realidad.

Te preguntarás ¿Cuál es el riesgo de ser ignorantes en este tema? En entradas previas he mencionado que el conocer la causa de un problema puede ser la llave que abra la puerta a su solución, entonces si aplicamos esa lógica, el saber por qué una persona se quiere suicidar, puede ser esencial para descifrar la mejor manera de ayudarle a continuar con su vida.

Por lo tanto, el vivir en la ignorancia por prejuicios que tenemos acerca del suicidio, resultará en un impedimento para serle de ayuda a ese ser querido que presenta pensamientos o conductas suicidas, ya que no podremos saber cómo ayudarle, lo cual podría llevar a la persona suicida a tener que superar aquello por lo que está pasando completamente sola, sin ayuda de nadie; o en el peor de los casos, a no poder superarlo por su cuenta y cometer suicidio sólo porque nuestra mentalidad estaba indispuesta a ser de ayuda.

¿Cómo superar el prejuicio colectivo sobre el suicidio?:

Ya tenemos claro qué es un prejuicio, cómo afecta negativamente nuestra actuar y por qué implica un riesgo el tener prejuicios sobre el suicidio, pero ¿Cómo superamos tales prejuicios? ¿Cómo nos desapegamos de esas ideas tan enraizadas en nuestro sistema de creencias que confundimos con la realidad?

Bueno, lo primero que tenemos que hacer, es reflexionar ¿De dónde vienen estas formas de pensar? ¿Es algo que alguien me inculcó en algún momento de mi vida? ¿De qué lugar lo aprendí? ¿Desde hace cuanto lo pienso? Tómate tu tiempo para responder a estas preguntas, ya que implica recurrir a muchos recuerdos y analizarlos a profundidad, y si logras descubrir que en todos estos prejuicios hubo influencias externas a tu persona, entonces estamos hablando de un prejuicio colectivo.

¿Esto qué significa? Que lo aprendiste de la sociedad, pero viendo el lado positivo, podemos concluir que no eres la única persona que es afectada por esto, no estás solo(a), hay más personas cómo tú allá afuera que han sido contagiadas con estos prejuicios erróneos sobre el suicidio, lo importante es que te diste cuenta de que lo que pensabas era un prejuicio, y no era cierto, así que a partir de ahora puedes elegir tener creencias no superficiales que te facilitarán ayudar a ese ser querido que es suicida.

Y si así lo deseas, incluso puedes crear un efecto dominó, en el que ayudes a otras personas a desprenderse también de estos mismos prejuicios, con lo que cada vez más personas potencializarán sus capacidades de ayudar a suicidas, promoviendo así el cambio y trabajando de forma colectiva por la generación de una sociedad donde más personas dejen de ser suicidas y puedan seguir adelante con sus vidas. 

¿Cómo superar el prejuicio individual sobre el suicidio?:

Por el contrario, si te diste cuenta de que tal vez esas ideas que tienes sobre el suicidio, no las aprendiste de la socidad, sino que tal vez son creencias que tú mismo(a) formulaste, no te preocupes, también se pueden corregir, tendrás que hacer un proceso de introspección para darte cuenta de porqué piensas eso, pregúntate ¿Desde hace cuándo comencé a pensar así? ¿Cuáles eran los argumentos con los que justificaba esa mentalidad? y sobre todo ¿De verdad lo pienso? ¿Ahora lo sigo pensando? 

Si reflexionas lo suficiente podrás ser consciente de cómo esos prejuicios eran creencias equivocadas, y que a partir de ahora puedes hacer de lado esta superficialidad para profundizar en el tema, comprenderlo mejor, y formular nuevas formas de pensar para tu sistema de creencias. 

Conclusión:

Todos dicen que el suicidio es un tema complicado y complejo, pero puede ser más simple de lo que parece, ya que parte de una única motivación: El ya no querer vivir, desafortunadamente, tenemos prejuicios sobre este fenómeno y las personas que lo sufren, adoptamos ideas preconcebidas que nosotros mismos nos inventamos o que aprendimos de otros; sin embargo, podemos comenzar a profundizar en lo que vemos, no quedarnos sólo con la superficie, con la distorsión de la realidad, con la idea de que la manzana en realidad es una naranja, y una vez que lo hagamos, podremos entender las motivaciones que hay detrás del suicidio, y cómo ayudar a otras personas para evitar que cometan el peor error de sus vidas. 

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Autoestima, Autoconfianza, Autoaceptación

¿Cómo mejorar mi autoconfianza?

Introducción:

¿Qué es la autoconfianza? El nombre es bastante obvio por sí solo, significa qué tanta confianza tienes en tu mismo(a) para hacer una cierta acción, y cómo las acciones son tan diversas, estas pueden provenir de cualquier ámbito en tu vida, pueden tratarse de actividades relacionadas con la escuela o el trabajo, o cualquier otro aspecto. 

No hay una forma muy precisa para medir la autoconfianza, tal vez tengas mucha de está en un ámbito de tu vida mientras que en otro tengas poca, los resultados pueden variar, ya que dependen de factores como las características de tu personalidad y el contexto en el que te desenvuelves.

Es por ello que no es extraño que tengamos nuestros momentos de alta o baja autoconfianza, pues todos somos diferentes, y nos vamos enfrentando a situaciones nuevas y diversas en las que desarrollamos diferentes miedos inseguridades que van y vienen, por lo que podemos concluir que es normal que nuestra autoconfianza pueda variar, pero creo que lo que de verdad nos molesta a todos es cuando nuestros niveles de autoconfianza tienden a la baja, así que ¿Qué hacemos ante esos casos? ¿Cómo hacemos que está suba? ¿Cómo nos sentimos más cómodos y mejor cuando la tenemos baja? 

¿Por qué te falta confianza en ti?

Para poder encaminarnos a una vida con mayores niveles de autoconfianza en las diferentes áreas de nuestra vida, deberíamos tratar de comprender primero la causa de nuestro problema, es decir, ¿Por qué es que a veces no tenemos confianza en nosotros mismos? ¿Por qué a veces nos sentimos tan inseguros e incapaces con respecto a tantas cosas que tenemos que enfrentar?

Bueno, una posible explicación a nuestra falta de autoconfianza tiene que ver con el contraste entre nuestras expectativas y nuestra realidad. Y es que todos formamos expectativas a lo largo de nuestras vidas sobre diversas cosas, esperamos que ciertos restaurantes nos den cierto servicio, esperamos que un producto cumpla con determinada función, esperamos cierto trato por parte de ciertas personas, esperamos cosas de nosotros mismos, pero ¿Qué pasa cuando nuestras expectativas son radicalmente diferentes a la realidad que nos rodea? La confianza en el objeto en la cual la hemos depositado disminuye, se empieza a derretir como un helado cuando hace mucho calor.

No solo dejamos de confiar en los lugares, cosas, o personas, sino también en nosotros mismos, pues resulta que ocasionalmente nuestra falta de autoconfianza se basa en la carencia de ciertas características deseables que nos gustaría poseer. Pues una cosa es lo que somos y otra cosa lo que nos gustaría ser, y cuando esa diferencia entre ambos extremos es abismal nos cuesta más trabajo confiar en nosotros mismos.

¿Qué pasa cuando te falta autoconfianza?

Ya que entendemos que la autoconfianza es una variable en nuestras vidas y puede disminuir por una realidad muy diferente a las expectativas que depositamos en nosotros mismos, vale la pena tomar en cuenta lo limitante que puede ser para nosotros vivir con baja autoconfianza, es decir, cuáles son las desventajas de ello, para que procuremos mantenernos lo más lejos posible de la baja autoconfianza. 

Y es que una de las mayores limitantes que te puedes poner en esta vida es dudar de tus propias capacidades, creer que no eres suficiente para lograr un determinado objetivo, que no lo lograrías incluso si lo intentarás, que tal vez no vale la pena después de todo, pues no crees en ti para hacerlo. Reitero, pensar eso es un error, porque cuando te autoimplantas en la mente esa idea de que no confías en ti para hacer tal cosa, automáticamente te estás programando para el fracaso, ya que al no creer en ti, no crees en tus posibilidades de éxito.

Por lo tanto, si tú no crees en ti para hacer tal cosa, es probable que ni siquiera lo intentes, o si lo intentas no des el 100% de ti para hacerlo, es decir: No le echas ganas, y el no intentarlo o no esforzarte puede ser la llave que abra la puerta del fracaso.

Y cuando abres esa puerta, también mandas el recuerdo de ese fracaso en particular a tu memoria, y lo que pasa después es que en el futuro, es que continuarás haciendo lo mismo ante una situación similar, es decir: No intentarlo o intentarlo sin ganas, lo que te llevará al mismo fracaso, una y otra vez.

¿Cómo ganar más confianza en ti mismo(a)?:

¿Recuerdas lo que te dije en mi entrada ¿Cómo lidiar con mi ansiedad?? Dije que un truco para eliminar la ansiedad es actuar como si no tuvieras ansiedad, ya que sin la venda de la ansiedad que te impide pensar con claridad para resolver tus problemas de forma eficiente, puedes deshacerte con más rapidez de las causas principales de tu ansiedad, y con ello quitarte la ansiedad también.

Podemos aplicar el mismo truco con el caso de nuestra autoconfianza, sólo pregúntate: ¿Qué haría en esta situación si no me sintiera inseguro(a), si no tuviera vergüenza, si confiara más en mí para hacer frente a lo que está sucediendo? La respuesta a ese cuestionamiento te dirá qué es lo que tienes que hacer, y una vez que lo sepas, será momento de fingir que tienes confianza y seguridad en ti y sólo hacerlo.

Haz la prueba, intenta aplicar este truco en un momento en el que no te sientas muy confiado(a) para hacer algo, después de haberte preguntado qué harías si tuvieras más confianza y haberlo hecho lograrás darte cuenta de que no era tan difícil después de todo, que aunque dudabas de ti, tenías la capacidad de hacerlo, entonces podrás decir que ya lo hiciste, y cómo ya lo hiciste, más adelante recordarás que lo lograste y te sentirás confiado(a) para desempeñarte en esa actividad o alguna otra parecida en el futuro.  

Olvídate de las expectativas irrealistas hacia tu persona:

Con respecto a este punto me gustaría citar un fragmento de la canción Lower your expectations del artista y comediante Bo Burnham, la cual da un gran consejo para encontrar el amor en la vida, el cuál es que dejes de tener expectativas demasiado altas e irrealistas sobre las personas, y simplemente elijas una a la cual amar, la canción dice así:

(…)

You want a guy that’s sweet

A guy that’s tough

A feminist who likes to pay for stuff

The kinda guy that gets along with your friends

Without being attracted to any of them

A good boy, a bad boy, a good bad boy

A half good, half bad, half boy

Loves your brother sensitive but not weak and

Is a great lover calls your mother on the weekend

Then you might think that this guy only exists in your mind

Well guess what

You’re right

If you want love

Lower your expectations a few

(…)

Qué traducida al español significa:

(…)

Quieres un chico que sea dulce

Un chico que sea rudo

Un feminista al que le guste pagar por cosas

El tipo de chico que se lleve bien con tus amigas

Sin sentirse atraído por ninguna de ellas

Un chico bueno, un chico malo, un chico bueno y malo

Medio bueno, medio malo, medio chico

Que quiera a tu hermano, sea sensible pero no débil

Qué sea un gran amante, que llama a tu madre los fines de semana

Entonces podrías pensar que este chico solo existe en tu mente

Bueno, adivina qué

Tienes razón

Si quieres amor, reduce tus expectativas un poco

(…)

Si bien, la canción te aconseja reducir tus expectativas con respecto a otra persona para poder amarla; también podemos aplicar el mismo consejo para con nosotros mismos, lo cual nos ayudaría no solo a amarnos a nosotros mismos, si no también a no esperar demasiado por nuestra parte, reducir nuestras irrealistas expectativas para sentirnos más relajados y confiar más en nosotros mismos para hacer las cosas. 

Y es que a veces nuestra falta de confianza se debe a que simple y sencillamente esperamos demasiado de nosotros mismos, nos exigimos más de lo que deberíamos, tenemos expectativas demasiado altas, ¿No sería mejor reducir nuestras expectativas un poco, tal y cómo sugiere la canción?

Conclusión:

Todos tenemos la capacidad de ser personas confiadas en sí mismas, pero no siempre nos damos cuenta de ello, y nos limitamos a no creer que somos capaces de hacer una cosa o la otra, dudamos constantemente, nos esforzamos menos, lo intentamos menos, y sólo por eso nos privamos de nuestras capacidades de tener éxito. Debemos aprender a relajarnos, a darnos cuenta de cuando depositamos expectativas demasiado altas en nosotros mismos, de cuando impedimos que nuestra confianza nos deje intentar las cosas siquiera. 

Habrá días en los que te sientas capaz de hacer cualquier cosa, y otros días en los que te sientas incapaz de hacer nada, y está bien, sólo asegúrate de no olvidar quién eres y lo puedes lograr si te lo propones, recuerda no dudar de tus capacidades, esforzarte en hacer las cosas que quieres e intentarlo las veces que sea necesario hasta que funcione. Incluso en los días en los que no te sientas capaz, recuerda que si finges sentirte capaz, terminas sintiéndote capaz. 

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¿Cómo sobrevivir a tus emociones y sentimientos?

¿Cómo lidiar con mi ansiedad?

Introducción:

¿Qué es la ansiedad? Ese horrible sentimiento que viene como una acumulación de estrés,  que nos produce un nudo en el estómago, un miedo aplastante por lo que podría suceder mezclado con una sensación de que nada está bien ni lo estará, y un paralizante que nos congela e impide movernos, estar ansiosos significa un congelamiento de los sentidos, que no nos deja pensar con claridad, ni en cualquier cosa buena, así como tampoco nos deja reaccionar en una situación, y solo nos ahoga lenta y dolorosamente en todos nuestros pensamientos negativos y pesimistas.

Es como si nuestro cerebro fuera una planta en el bosque siendo bombardeada por una tormenta eléctrica, y los rayos que fríen nuestro órgano nos recordaran a cada segundo que todo está mal, que todo puede salir mal, y que sentir angustia es la única posibilidad en el momento. 

Identifica los estímulos de tu ansiedad:

Todos estamos familiarizados con la ansiedad, y por supuesto tenemos claro que es un sentimiento horrible, pero la pregunta es: ¿Cómo nos deshacemos de ella? Hay que considerar a la ansiedad como un problema más de nuestra vida cotidiana, y como todo problema, este tiene una causa, y la causa puede ser la llave que abra la puerta a la solución.

Por más difícil que sea (ya que la ansiedad nubla nuestro juicio y raciocinio), debemos comenzar a relajarnos por un instante, sólo respira de forma lenta y profunda durante unos minutos para calmarte un poco mientras comienzan un trabajo de introspección que te ayude a identificar el o los estímulos estresantes que te están induciendo ese sentimiento de ansiedad.  

Una vez identificados esos estímulos podemos ordenarlos según su prioridad, cómo mencioné la ansiedad es un sentimiento producido por varios estímulos estresantes, por lo tanto, pueden ser varias las cosas que nos están angustiado, entonces, ponerlas en una lista de la más importante a la menos importante, nos ayudará a ir resolviendo cada problema del más grande al más chico para así eliminar la ansiedad hasta el final. 

Suelta la tensión mientras los cosas se resuelven:

Como expliqué previamente en mi entrada: Consejos para lidiar con el estrés: “La clave para combatir el estrés no es mantener la tensión hasta que el problema se vaya, sino soltarla mientras este se soluciona”, lo mismo aplica para combatir la ansiedad, como son varios los problemas que nos afligen y nos ponen ansiosos, son varias las soluciones que tendremos que ir aplicando, así que si los problemas toman su tiempo para resolverse, ¿Qué sentido tiene estar ansiosos durante todo ese lapso de tiempo, si eso ni siquiera contribuye a la solución de nuestros problemas?  

Entiende que la ansiedad es solo una exageración:

En la literatura y los medios visuales existe una figura retórica llamada hipérbole, la hipérbole tiene como fin producir una exageración, agrandar la importancia de alguno de los elementos de la poesía, narrativa o imagen al aumentarlos en tamaño o alguna otra característica.  

Si hacemos una relación entre la ansiedad y la hipérbole, nos podemos dar cuenta de que la ansiedad no es más que una hipérbole, ¿Por qué? Porque una de las características de la ansiedad es que esta viene con sentimientos de angustia y preocupación por el futuro, y tales angustias y preocupaciones vienen de una imaginación humana que las exagera.

Es por lo anterior que la ansiedad puede ser resumida como una angustia o preocupación exagerada con respecto al futuro.

Siempre que estamos en una situación negativa, nuestra imaginación se dispara en un intento de predecir el futuro, y lo predice en base a una exageración desmedida de la realidad que nos convence de que algo malo va a pasar.

Sin embargo, una cosa que vale la pena tomar en cuenta, es que cuando te pones a analizar los productos de tu imaginación y detectas las hipérboles de la misma, te podrás dar cuenta de que la ansiedad incluso puede ser un sentimiento irracional e infundado. 

Actúa como si no sintieras ansiedad:

Una cosa que puedes hacer cuando experimentas ansiedad, es el siguiente truco: Actuar cómo si no sintieras ansiedad. Cómo mencioné previamente, la ansiedad te paraliza y afecta tu juicio y raciocinio, por lo tanto, también limita tu actuar, sólo piénsalo¿Te ha pasado que cuando estás ansioso(a) te frustras porque no logras resolver los problemas que te están afectando?

Lo anterior podría suceder debido a que como no puedes pensar con claridad, tampoco eres efectivo o eficiente a la hora de resolver esos problemas, pero imagina que pudiéramos quitar la ansiedad, al sentirte más calmado(a) cómo consecuencia, podrías resolver tus problemas de forma mucho más rápida y fácilmente. 

Entonces, si nos basamos en esa lógica, ¿Por qué no intentas fingir que no tienes ansiedad? Pregúntate a ti mismo(a) qué harías si no sintieras ansiedad, y hazlo, no importa que esto no elimine tu ansiedad, porque si lo haces podrás resolver los problemas que están causando tu ansiedad en primer lugar, y mientras más rápido los resuelvas, más rápido dejarás de sentir ansiedad.

Prueba distraer tu mente:

Otro truco que puedes probar para manejar tu ansiedad, es simple y sencillamente distraer tu mente, ya sabes lo que dicen: “Ojos que no ven, corazón que no siente”. Tal vez solo tienes que olvidarte por un rato de todos los problemas que te afligen y del hecho de que sientes ansiedad para dejar de sentir ansiedad, así que trata de dirigir tus pensamientos y energía hacia otras cosas, mantente ocupado(a) en otras actividades y pronto dejarás de sentirte así.

Conclusión:

Sufrir de ansiedad es completamente normal, después de todo es producto de nuestro instinto de supervivencia, es nuestra naturaleza tratando de mantenernos a salvo, sin embargo, no deberíamos de normalizar el pasarnos todo el tiempo ansiosos, sintiéndonos mal, o incluso enfermandonos por ello, ya que no hay que olvidar que el estrés y la ansiedad pueden llevarnos a sufrir enfermedades.

Nuestra imaginación interpreta la realidad como una composición de hipérboles y nos induce ansiedad, a veces por causas que no tienen sentido, pero lo que es real es que necesitamos una vida con el mínimo de ansiedad posible para poder sentirnos bien y funcionar en nuestra vida cotidiana, así que prueba identificar los estímulos de tu ansiedad para hacer algo al respecto, date cuenta de en qué está exagerando tu ansiosa imaginación para que no te angusties por cosas insignificantes, actúa como si no sintieras ansiedad, y distrae tu mente cuando la sientas, y tal vez aplicando estos trucos, puedas comenzar a tener el control sobre tu ansiedad en vez de que tu ansiedad tenga el control sobre ti.

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Taller literario

¿Cómo comenzar a escribir mi worldbuilding?

¿Qué es el worldbuilding?

La palabra worldbuilding, viene del inglés y significa literalmente “construcción del mundo”. Worldbuilding es además un término que se utiliza en el mundo de la literatura para designar a todo el proceso que conlleva la creación creativa de un mundo donde acontece una historia ficticia. 

Dicha historia puede provenir de una novela, cuento, guión, o cualquier otro medio escrito del storytelling (el storytelling es otro término en inglés que significa literalmente “contando una historia”, por lo que designa a un medio que tenga cómo función contar una historia).

Vivimos en un mundo repleto de historias que son consumidas por medio de libros, películas, videojuegos y otros medios de entretenimiento, y todos narran historias que son productos de la imaginación humana, por consiguiente nos dan también nuevos mundos para explorar, ya que toda historia proviene de un mundo particular.

La importancia del worldbuilding:

Para comprender mejor el papel del mundo de la historia, plantearé una analogía historia-obra teatral: Contar una historia es cómo presentar una obra de teatro ante un público, y la obra de teatro no se trata sólo de contar una serie de acontecimientos, sino también de crear una atmósfera para los mismos.

Supongamos que tienes a tus personajes actuando frente a la audiencia, pero no les diste utilería, ni el vestuario o maquillaje acordes al contexto que están actuando, tampoco hay escenografía, por lo que el espectador no puede ver en dónde están los personajes a los que ven. Si bien, la actuación de los personajes puede dar una idea de dónde se encuentran, no están presentes los elementos que dan la atmósfera de la historia.

Podemos afirmar que contar una historia sin un mundo, es equivalente a querer presentar una obra teatral sin escenografía, utilería, vestuario ni maquillaje, sin atmósfera básicamente. Es por lo anterior que el crear la atmósfera es tan importante, puesto que le da un contexto a los personajes y a las situaciones a las cuales se enfrentan, además de que ocasionalmente los conflictos a resolver tienen relación con el mundo en el que están planteados, no únicamente con los personajes en sí. 

El worldbuilding implica también que tienes la responsabilidad de construir un mundo desde cero en todos sus aspectos: Hacer una sociedad, darles alguna religión, implantarles un sistema de creencias, determinar sistemas políticos y económicos que funcionen dentro del mundo, y en términos generales una atmósfera completa para tu historia.

Es por todo lo anterior que te invito a dedicar el tiempo justo y suficiente para el proceso de creación del mundo de tu historia, ya que es lo que transporta al lector a las aventuras que le cuentas, las personas recuerdan las historias que consumen principalmente por los mundos que presentan, estos son el gancho, lo que los cautiva, lo que atrapa su atención.

¿Por dónde comenzar?

A la hora de trabajar en tu worldbuilding te darás cuenta de que el flujo de tus ideas no necesariamente tendrá un orden en específico, es decir: Las cosas se te irán ocurriendo en desorden, tú tendrás que ordenarlo todo después. Ya que el worldbuilding no tiene un orden específico, no hay una lista de pasos a seguir, tú los tienes que ir formulando en la marcha.

Así que no te claves con un orden, si tú por ejemplo quieres trabajar los aspectos políticos y luego los sociales, tal vez se te ocurra las cosas al revés, así que ¿Qué te recomiendo que hagas? Toma notas de tus ideas como vayan llegando para evitar que se te olviden, y cuando tengas los aspectos políticos y sociales, los ordenas cada uno por un lado y si quieres trabajar con los sociales primero lo haces. 

Durante el proceso es posible que te sientas abrumado(a) por la cantidad de aspectos que quieres abordar y la cantidad excesiva o escasa de ideas que vayas generando, no te preocupes, es completamente normal que te sientas así, tal vez incluso te bloquees.

Si te llegas a abrumar o a bloquear, yo te recomiendo que no seas tan crítico contigo mismo(a), piensa que todas tus ideas son válidas y pueden ser útiles, así que no las descartes en un ataque de perfeccionismo o de preocupación por qué no encajen unas con las otras, lo que debes hacer es registrar cada idea, ya habrá tiempo de elegirlas y descartarlas cómo mejor convenga. 

¿Cómo seleccionar mis ideas para el worldbuilding?

Todos tenemos cientos de ideas todos los días, sin embargo, no todas ellas nos llaman la atención o resultan en acciones, a veces se quedan en simples pensamientos con los que nunca hacemos nada. Algo muy similar ocurre cuando estamos trabajando en el worldbuilding de nuestra historia, podremos tener un millón de ideas, pero de ese millón solo utilizamos una pequeña parte. La cuestión es ¿Cómo decidimos sobre cuáles ideas trabajar y cuáles dejarlas como simples pensamientos en nuestra mente? 

Existen dos posibles aproximaciones para determinar la respuesta a dicha pregunta, la primera consiste en enlistarlas todas, escribe todas las ideas que se te ocurran para tu worldbuilding, no importa qué tan descabelladas puedan sonar o si crees que unas no encajan con las otras, solo enlístalas para tenerlas todas presentes, luego trabaja cada una de forma superficial, es decir, si por ejemplo una de tus ideas fue que en tu mundo de fantasía haya dragones, tan solo responde en unas pocas líneas ¿Qué harían dichas criaturas en este mundo? ¿De qué te sirven? ¿Qué te gustaría hacer con ellas? No hace falta que escribas una justificación de diez páginas sobre la idea de poner dragones en tu historia, sólo responde qué harías con estos dragones en unos pocos renglones.

Repite el paso anterior con todas tus ideas, y ya que hayas recolectado toda esta información sobre qué podrías hacer con las ideas que se te ocurrieron, procede a tratar de unirlas unas con otras, ahora es el momento de que veas qué encaja con qué, o qué no encaja, y con las ideas que al final no encajen tienes dos opciones: O la eliminas o haces modificaciones, ya sea a la idea que no encaja con el resto, o a las ideas con las que quieres que encaje está idea que desencajó.

Haz esto con todas las ideas, al final tendrás una especie de rompecabezas de ideas, este será el esqueleto de tu worldbuilding, una vez que lo tengas ya podrás explayarte más con todas tus ideas para continuar armando tu mundo. 

Sobre la investigación:

Otro aspecto importante sobre tu worldbuilding es la investigación, todos hemos investigado cosas a lo largo de nuestras vidas, desde que las tareas escolares que nos dejaban hasta las preguntas curiosas que tenemos en nuestro día a día, vivimos en la era de la información, contamos con múltiples medios de comunicación y estamos en un constante intercambio de ideas y conceptos, es por todo lo anterior que es normal e incluso natural para nosotros investigar cosas, puesto que no es nada a lo que no estemos acostumbrados.

Entonces, investigar para nuestro worldbuilding debería ser relativamente sencillo, así que hay que pensarlo como un proceso de buscar información de nuestro interés que esté relacionada a las ideas que hemos planteado inicialmente, después de todo tenemos todos los recursos a nuestra disposición: Revistas, noticias, artículos de divulgación científica, documentales, sitios web, vídeos, entre muchos más.

Ahora podrás preguntarte: ¿Qué tanto tenemos que investigar? Bueno, eso depende, si por ejemplo escribes ciencia ficción, podrías basarte en el subgénero para tomar la decisión: ¿Es ciencia ficción blanda? Entonces tú investigación no tiene que ser tan profunda porque la mayor parte de la información es contenido de fantasía, y sólo una mínima parte es ciencia real; por el contrario: ¿Es ciencia ficción dura? Entonces tú investigación deberá ser más profunda porque la mayor parte de la información es ciencia real, y sólo una mínima parte es contenido de fantasía.

O simplemente podrías partir de las preguntas: ¿Qué tanto me interesa investigar? ¿Qué tanto me llaman la atención estos temas? ¿Me gustaría usar más de esta información para construir mi mundo? Una vez que hayas determinado esto y terminando de recolectar toda la información que deseas, puedes proseguir seleccionando tus ideas, recuerda que es posible que no utilices absolutamente toda la información que hayas investigado, al igual que tal vez no utilizaste absolutamente todas las ideas que se te habían ocurrido, así que sólo sigue tres simples pasos con la información: Investiga, comprende y selecciona.

Ahora, sé que dije que investigar era relativamente sencillo, sin embargo, te estaría mintiendo si no te mencionara que también puede resultar bastante complejo, ya que dependemos de un cierto nivel de comprensión para poder trabajar con la información que vamos absorbiendo de diferentes fuentes, debo admitir que cuando trabajé mi universo de ciencia ficción y decidí cambiar la ciencia ficción blanda por una historia con más contenido científico (que por cierto me obligó a replantearme todo mi universo y editarlo exhaustivamente), tuve que investigar mucho más y hubo momentos malos en los que me sentía abrumada por tanta ciencia, no entendía muchas cosas y no tenía idea de cómo unir todas las ideas que tenía y el contenido que iba investigando.

Por lo tanto, me gustaría decirte que es normal que durante la investigación, sientas abrumación, confusión, cansancio o frustración, sólo recuerda que el punto de todo esto es disfrutar por lo menos la mayor parte, si hablas de ciertos temas es porque te interesa, así que no deberías sufrir de sobremanera durante tu investigación, si en algún momento sientes que es demasiado el malestar que te provoca, tal vez deberías replantearte las posibilidades o de no investigar tan a fondo, o de modificar tus temas para encaminarte a otra dirección que te guste.  

Conclusión:

Finalmente el worldbuilding es un proceso que implica hacer una lluvia de ideas, una investigación, y al final una selección masiva de contenido en la que buscas armar el rompecabezas de tu mundo o universo. Es un proceso que si bien, puede resultar largo, complicado, y laborioso, vale la pena cada segundo que inviertas en él, vélo como una inversión para tu historia, incluso si gastas mucho tiempo en elementos que al final decides no utilizar, o el resultado que vayas obteniendo no te convence del todo, tú ten presente que todo se puede corregir en todo momento.

Personalmente, yo duré cerca de un año trabajando en el worldbuilding de mi primer libro de ciencia ficción, y más adelante luego de unos borradores de mis primeros tres libros, hice una edición exhaustiva y profunda del mismo, en la que corregí partes que no embonaban del todo con el resto, agregué elementos y mejoré todo lo que vi como oportunidades para que fuera aún mejor.

Así que tómate el tiempo que necesites, complícate todo lo que tengas que complicarte para trabajarlo, y perfecciónalo tanto como desees. Cómo decía mi antíguo profesor de artes marciales: “Todo se puede mejorar”.

Así que si no todo sale bien, corrígelo, y si no te satisface del todo y crees que podría ser mejor, mejóralo, recuerda que hacer el worldbuilding es como hacer una escultura, puedes agregar, quitar, y modelar el material a tu gusto para crear la forma con la que tanto soñaste, así que disfrútalo, porque es la parte más divertida de hacer una historia.

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¿Por qué interesarse en el arte?

Introducción:

Todos alguna vez hemos tenido contacto con el arte: Quizás hemos ido a museos, admirado pinturas o esculturas, leído libros, contemplado danzas, escuchado música, visto obras de teatro o ido al cine. O quizás hemos sido más que espectadores, hemos llegado a dibujar, a cantar en la ducha, o practicado alguna actividad cultural.

El arte es el fenómeno de nuestra vida donde transitamos constantemente entre la posición de espectador(a) y artista, pues algunos días produciremos mientras que otros sólo observaremos lo que los demás hacen, sin embargo, al final del día, el arte es parte de nuestra vida diaria aunque no siempre nos demos cuenta.

Las artes visuales, audiovisuales, escénicas, o literarias, y de todas las ramas están en nuestra vida todos los días de alguna forma, intenta un día prestar atención a los productos que consumes y las actividades que realizas para que notes en cuántas de ellas se encuentra el arte.

¿Qué es el arte?

Ya que tenemos una noción del fenómeno, vale la pena preguntarse qué es el arte, pero debo advertirte que no existe una respuesta absoluta y definitiva y a decir verdad, no sé si algún día haya una. A lo largo de la historia ha habido múltiples pensadores corrientes, y movimientos artísticos, cada uno con su propia ideología y concepto de arte; los críticos del arte han debatido y continúan debatiendo la artisticidad de determinadas obras y artistas cada cierto tiempo, por lo que el título de arte para ciertas obras puede ser flexible.

El arte siempre formó parte de la vida esencial de las diferentes culturas a lo largo de la historia, desde la prehistoria hasta el arte de la antigua Grecia, en la cual ni siquiera existía el término arte, lo más parecido que tenían era la palabra techné, la cual incluía diversos oficios como la carpintería, creación de zapatos, poesía, medicina, escultura y épica, ya que techné se refería a la destreza de hacer algo, a la habilidad. Por lo que cuando en nuestra vida cotidiana alguien admira a una persona por su habilidad en alguna actividad y lo denomina arte, a pesar de que no entraría en la categoría de arte de manera formal, si entra si se considera al término techné. 

 Actualmente el arte de las antiguas culturas y civilizaciones son monumentales minas de información para los historiadores y científicos, pues representa grandes legados culturales que contienen el estilo de vida y comportamientos propios de las épocas a las cuales pertenecen, por lo que actúan como cápsulas del tiempo; y en lo que refiere al arte contemporáneo, este nos explica el estado de nuestra época actual. 

El filósofo Platón creía que el alma es en parte divina y en parte mortal, y es nuestra parte divina la que despierta ante la visión de la belleza, por lo que define al arte como un ideal, bello, armónico, sensible, vital, y con participación mística; incluso sugirió un mundo ideal donde el arte bello es arte democratizado.

Sin embargo, es relevante considerar que la belleza no es la única categoría estética que puede adoptar el arte, el arte abyecto cree que si la sociedad es inmoral, entonces el artista no tiene porqué hacerle arte bello, por lo que el arte será una denuncia, obtendrá inspiración de la guerra y hablará sobre lo vil, la tortura corporal, y la repugnancia, ya que mientras se vea repugnante y no bello, cumplirá su objetivo.

Para el arte del renacimiento, el arte era humanista y tenía al humano como el centro de su representación. Los impresionistas por su parte, consideraban al arte como una representación objetiva de la realidad, es decir, al igual que muchas culturas previas, mimetizaban las formas del mundo visible, y en este caso las representaban con un alto nivel de iconicidad. 

Herbert Read en su libro Imagen e idea dice que: “El arte es un esfuerzo para perpetuar o registrar sentimientos”, por lo que este autor cita al filósofo Collingwood con su idea de “La corrupción de la consciencia”, la cual dice que el arte es un medio exclusivo para los sentimientos, y que en el momento en el que el artista mete sus pensamientos en su obra, está metiendo también la filosofía, la cual no concierne al arte y por ende está corrompiendo su conciencia artística, es decir: El arte es para sentimientos no pensamientos, o en palabras más simples que una vez oí de un profesor: “Una pintura no es un ensayo”.  

Si exploramos el arte contemporáneo podremos darnos cuenta de que ni siquiera en los movimientos de vanguardia se han puesto de acuerdo todas las corrientes sobre cómo es la mejor manera de definir al arte: Para los expresionistas, el arte era una representación subjetiva de la realidad objetiva, una distorsión o deformidad con bajo nivel de iconicidad. Para el cubismo el arte es una abstracción que geometriza las formas visibles, contrario al modelo renacentista que colocaba a los objetos en una perspectiva central, este buscaba deformarlos para así dotarlos de tridimensionalidad, movimiento y energía. 

Para el arte abstracto, el arte es la negación de la representación, y la búsqueda de la pureza y la experimentación que generan un ritmo visual. Para el arte constructivista, el arte era aquel que nunca representaba al ser humano, pues a diferencia del renacimiento cuyo centro de la representación era el ser humano (como producto del humanismo); el constructivismo quería deshumanizar al arte y sacar al humano de su centro de representación, pues las guerras habían demostrado que el ser humano era un ser destructivo, y el objetivo era guiar al humano a un futuro mejor, no enaltecerlo. 

Para el dadaísmo, “dadá” significa literalmente nada, por lo que el arte es un concepto más que una representación, por ello es que el arte será efímero, no buscará ser bello ni trascendente, sino sólo ser pasajero mientras trastorna a la belleza y rechaza lo sublime. Para el surrealismo el arte es una revolución del inconsciente, que se centra en el desocultamiento del subconsciente, ese espacio de la mente que aloja cosas reprimidas, temores, y deseos, lo más instintivo de la naturaleza humana, por lo que este arte muestra mundos oníricos, carentes de sentido y de lógica, pues muestra el lado invisible del ser humano. 

Para el Pop Art, el arte es una representación de la cultura de masas por medio de imágenes publicitarias y audiovisuales. Para el minimalismo el arte es la utilización de elementos mínimos y básicos como colores puros, figuras geométricas, y un lenguaje sencillo en general. 

Para el performance el arte gira en torno a la experiencia del cuerpo, ya que el cuerpo humano es el objeto para producir arte efímero y significativo. Para el arte urbano, el arte debe ser una representación de los problemas que inquietan a la sociedad, y estar en un espacio público que democratice la idea misma del arte. Para el conceptualismo el arte es algo tan simple como una idea, un concepto, el cuál se manifiesta a través de un objeto común que remite a la idea del arte.

Han pasado siglos de vida y arte, donde grandes artistas, filósofos, pensadores y expertos de diversas áreas, así como personas comunes se han cuestionado qué es lo que el arte engloba, qué es lo que el arte debería ser, cuál es el trabajo de un artista. Sin embargo, no hay una respuesta, sino mil, y la respuesta correcta depende de tu subjetividad, es decir, la respuesta correcta, es simple y sencillamente la que tu creas correcta, no esperes que alguien venga y te diga lo que es o no es arte, pues la definición del arte es cómo un camaleón, se la pasa cambiando de color a cada rato. 

¿Por qué debería interesarme el arte?

Si bien carecemos de una definición absoluta y definitiva del arte, sabemos que el arte es producto de nuestra sensibilidad humana, es la representación de la realidad con la que vivimos y que queremos externar, puede etiquetarse en múltiples categorías estéticas, períodos históricos y movimientos de vanguardia. 

Sin embargo, una cosa en común que tienen todas las artes es que así como parten de una realidad subjetiva, se interpretan con una realidad subjetiva, es decir, al apelar a nuestra sensibilidad y pensamientos, tendrá significados diferentes para cada persona que se cruza con el mismo, por ejemplo: un libro provocará diferentes ideas y reacción sensible a cada persona, y está bien, porque esa es la idea, por lo tanto, el arte influye en nuestras vidas todo el tiempo, 

Por eso es que el arte está en constante cambio y evolución, está en movimiento y nunca estático, pues es una invención humana, y no hay una definición absoluta y definitiva del ser humano, ¿Así que porqué habría de haber una para el arte? Pero dejando de lado nuestro maravilloso fenómeno indefinible, me concentraré en la interpretación del arte, como dije, este producirá diferentes reacciones sensibles, pues está pensado para apelar a tu lado humano, a tu lado más emocional, sentimental y vulnerable.

¿Qué acaso el arte no es fascinante considerando todo esto? ¿Considerando cómo adopta miles de identidades con el paso de los años? El arte es complejo y sensible, como las personas, es una extensión de nosotros, forma parte de nuestra identidad histórica, cultural e individual, por lo que es un fenómeno digno de interés por nuestra parte, pues es un fenómeno que nosotros creamos, así que ¿Por qué resistirnos a consumirlo?

Sólo vive el arte:

Una forma personal que tengo de ver el arte es cómo medicina, pues el arte tiene el poder de hacernos sentir mejor, sanar heridas, ser mejores personas, influenciar nuestros modos de pensar, sentir y actuar para encaminarnos de formas más positivas. Las artes reactivan la humanidad, impulsan la mente, te dan emoción y sentimiento, te preparan para la ecuación de la existencia al mantenerte en movimiento, al llevarte del llanto a la risa, te recuerdan que no eres una constante sino una variable al igual que todo, y te hacen sentir con vida. Es por todo lo anterior que yo te propongo lo siguiente: Consume y crea arte, y eso te hará feliz.

Referencias:

Brea. J. L. Cambio de Régimen Escópico: Del inconsciente óptico a la e-image. 

Danto. A. C. El abuso de la belleza: La estética y el concepto del arte. España: Paidós.  

La vanguardia intratable. 

Read. H. Imagen e idea: La función del arte en el desarrollo de la consciencia humana.

Sánchez. N. L. J. Historia del cine Teoría y géneros cinematográficos, fotografía y televisión. Madrid: Alianza Editorial. 

Shiner. L. La invención del arte.

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¿Cómo sobrevivir a la automutilación?

Odiarte no es justificación para hacerte daño

¿Por qué te odias tanto?:

A veces la persona a la que más odias en el mundo es la que te devuelve la mirada en el espejo, la que duerme en tu cama, comparte tus pensamientos, emociones y sentimientos,  sentimientos a veces esa persona, eres tú. Pero ¿Por qué sientes eso, por qué no puedes quererte, por qué estás rebosando de tanta ira y odio hacia tu propia persona? 

Pareciera una pregunta muy simple, pero su respuesta tan difícil de obtener se siente compleja y distante, pues a veces no nos entendemos a nosotros mismos y solo sabemos de nuestra convicción de que sentimos aversión hacia nosotros mismos. Podemos tratar de comprender el por qué de nuestro odio si consideramos tres esferas de nuestras vidas, tres tiempos: presente, pasado y futuro, cada una de las cuales tiene un peso que nos produce dicho sentimiento.

Comencemos por la esfera del pasado, todos tenemos un pasado, y ocasionalmente tenemos una relación negativa con el mismo, ¿A qué me refiero con esto? Que el recordar nuestro pasado nos produce una reacción negativa, pues genera sentimientos como vergüenza y arrepentimiento, nos hace decepcionarnos de nosotros mismos y afecta directamente nuestra autoestima y autoconfianza (capacidad de amarnos a nosotros mismos y confiar en nosotros para desempeñar diversas actividades en nuestras vidas).

Ocasionalmente cuando tenemos una relación negativa con nuestro pasado lo terminamos arrastrando a nuestro presente y futuro, condenando estas dos esferas de tiempo. A lo que me refiero es que nos obsesionamos con el pasado, no lo dejamos ir, y eso influye en cómo nos sentimos y actuamos ahora mismo, y también cómo nos sentiremos y actuaremos más adelante.

De un modo similar, cuando tenemos una relación negativa con nuestro presente, nos sentimos mal con nosotros mismos, reducimos nuestros niveles de autoestima y autoconfianza, y al sentirnos mal con nosotros mismos y nuestras vidas ahora condenamos nuestro futuro, provocamos una relación negativa con dicha esfera. 

Es decir, si ahora estamos insatisfechos y nos sentimos mal, nuestras expectativas para mañana, la próxima semana, mes o año también se inundan de insatisfacción y malestar, si en el presente no nos gusta, nos frustramos creyendo que nuestro futuro tampoco nos va a gustar, por lo que perdemos nuestras esperanzas e ilusiones. Si esto te está sucediendo, déjame decirte una cosa: Deja ya de recurrir a los recuerdos de los malos momentos y fracasos, porque no hay un límite de errores para comenzar a mejorar tu camino, tal vez el ayer fue un desastre, pero no por eso hoy y mañana tienen que serlo también.

Tal vez en este preciso momento tienes una relación negativa con tus tres esferas de tiempo, te avergüenza tu pasado, te disgusta tu presente y no tienes ni la más mínima esperanza para tu futuro, quizás de ahí que te odies a ti mismo(a). Y cuando te odias es probable que pienses que no mereces nada bueno, y quieras castigarte, quieras dañarte, tal vez es por eso que piensas en recurrir a la automutilación, es por ello que te propongo que te plantees tus tres esferas de tiempo de un modo diferente para tener una relación más positiva con las mismas, piensa que el pasado ya pasó, el presente es una oportunidad, y el futuro es tu derecho. 

Reconcíliate contigo mismo(a):

Tienes que hacer las paces con tu pasado para poder seguir adelante; debes aceptar tu presente sin resignarte a las malas situaciones que se te puedan presentar y caer en la frustración (Lee aquí mi entrada ¿Qué es la frustración?¿Cómo lidiar con la frustración?); y sobre todo es de suma importancia que te permitas a ti mismo(a) tener esperanzas e ilusiones para tu futuro y no sólo melancolía y pesimismo. 

Recuerda que el sufrimiento es una elección a la cual nos encaminamos de manera inconsciente por medio de nuestras propias decisiones, así que comienza por cambiar tus decisiones, olvídate de esa idea de hacerte daño, puesto que no te llevará a ningún lado, no cambiará nada, no te hará sentir mejor.

Trabaja en tu autoestima:

Seamos honestos, para que cuides algo, primero tienes que amar a ese algo, a lo largo de nuestra vida, como seres humanos desarrollamos conexiones emocionales por otras personas, lugares o cosas, y cuando tenemos dicha conexión emocional es fácil que se desarrolle un sentimiento de amor y apego, y ¿Qué pasa cuando sentimos amor? Tenemos el instinto de cuidar el objeto de nuestro amor.

Es decir, si tu por ejemplo amas a algún familiar, vas a querer cuidar de ese familiar, si amas a tu mascota, vas a querer cuidar de esa mascota; si amas una planta, vas a querer cuidar de esa planta, o si amas un lugar, vas a querer cuidar de ese espacio. En resumidas cuentas procurarás el bienestar y la felicidad de aquel o aquello que te produzca amor, es un instinto por el que te has guiado múltiples veces, incluso ahora es muy probable que lo hagas sin darte cuenta, sólo piensa en todas las personas, lugares o cosas por las que al sentir alguna clase de afecto, has hecho algo por cuidarles y que estén bien. 

¿No crees que sería lindo que te amaras a ti también para que te pudieras cuidar? Te voy a decir una verdad que puede ser triste si en este momento tu autoestima no está en las mejores condiciones, pero tienes que oírla: Jamás vas a cuidar de ti, ni a estar bien contigo mismo(a) si no comienzas a amarte.

Existe una persona que puede amarte, cuidarte y procurar que estés bien, y esa persona eres tú, así que ámate del mismo modo en el que has amado a otros a lo largo de tu vida. Sé que los cambios en tu autoestima no ocurrirán de la noche a la mañana, toma tiempo, así que empieza a tomarte tu tiempo para aprender a aceptarte cómo eres, a darte cuenta de que eres un ser muy especial y único, y de que no mereces ser odiado y maltratado, mucho menos si esa persona que tanto te odia y maltrata eres tú (Lee aquí mi entrada: Tengo mala autoestima ¿Qué debería hacer para más consejos de autoestima). 

No porque te odies mereces un castigo:

Por último quiero decirte que es completamente normal que cuando tienes baja autoestima y te odias a ti mismo(a) tu mente comience a generar pensamientos malos que te hacen creer que mereces que te pasen cosas malas, que mereces un castigo, y que mereces ser tú quién ejecute dicho castigo. 

Cada vez que pienses que mereces la automutilación, que te pase las peores cosas, y que no mereces nada bueno en esta vida, quiero que recuerdes que eso no es cierto, tú vales mucho y un día te darás cuenta de eso cuando comiences a amarte más, sólo tienes que empezar a cuidar de ti como si te quisieras, y un día sin darte cuenta te habrás empezado a querer; una vez que eso pase finalmente habrás dejado de odiarte tanto y cuando sepas lo mucho que vales entenderás que no hay nada de malo contigo, no existe ninguna obsesión de tu pasado, ni inconformidad con tu presente, ni desilusión con el futuro que valga lo suficiente para que te lastimes; y el día en el que finalmente decidas aceptar que mereces lo mejor de esta vida, va a ser el día en el que dejes de pensar siquiera en hacerte daño. Y no te angusties, porque yo sé que tienes la capacidad de hacer que ese día llegue muy pronto. 

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Autoestima, Autoconfianza, Autoaceptación

Tengo mala autoestima ¿Qué debería hacer?

Introducción:

La autoestima, ese estado de la condición humana de satisfacción plena con la identidad propia, así como de orgullo y entusiasmo por la misma, son esos momentos, esos períodos de nuestras vidas donde nos aceptamos completamente y sin condiciones, donde nos amamos y no cambiaríamos el ser nosotros mismos por nada en este mundo.

¿Suena hermoso no? Si tan solo fuera una realidad para nosotros, si tan solo no estuviéramos llenos de vergüenza, aversión, y rechazo hacia nosotros mismos, si tan solo nos gustáramos cómo somos, pero ni siquiera eso, porque vivimos cada día pensando en todo lo que está mal con nosotros, en todo lo que odiamos y desearíamos cambiar de nuestra identidad, desde lo superficial que nos devuelve la mirada en el espejo por las mañanas hasta lo más profundo de nuestras almas, mas nunca pensamos siquiera en lo que podemos amar de nosotros mismos.

Pues a veces pareciera que no hay nada que nos guste, nada digno de amor, aceptación, mucho menos orgullo, a veces nosotros mismos somos las personas por las que más desagrado sentimos. Está claro que una de las peores cosas que podemos sentir hacia la propia persona es el rechazo, pero ¿Cómo pasar de una reacción que se siente tan congruente considerando nuestra situación a eso que llaman buena autoestima?

Amar lo negativo de nosotros mismos:

Admitámoslo, es muy fácil decir que debemos amarnos y aceptarnos a nosotros mismos, pero no es igual de fácil hacerlo, Así que ¿Cuál es la manera de lograrlo? Recientemente abordé el tema de la negatividad, cómo este fenómeno nos ciega de la realidad al mostrarnos un sólo aspecto de la misma, (Lee aquí mi entrada: ¿Cómo tener pensamientos positivos?)

En resumidas cuentas, hablé de que debes aceptar la negatividad de la vida, sentirte en paz con ella pero sin resignarse a la misma, entendiendo que el cambio para bien siempre es una opción; del mismo modo darte cuenta de que todas las situaciones tienen aspectos positivos y negativos, no hay nada completamente positivo o negativo, y mientras más rápidamente lo entiendas, más prontamente podrás ver también el lado positivo para así comenzar a actuar y resolver problemas así como ir borrando la negatividad para alcanzar lo mejor de toda situación.

En el caso de la autoestima, pasa algo muy similar, debemos aceptar que somos seres a blanco y negro, con virtudes y defectos, aceptar los defectos sintiéndonos en paz con los mismos (no necesariamente resignándonos a ellos de forma permanente), para así enfocarnos en lo positivo y como convertir lo negativo en algo positivo sin perder el enfoque objetivo de la realidad.

El aprender a aceptar lo negativo de nosotros mismos sin dejar que eso nos deprima, hace que se vuelva muchísimo más sencillo pasar de la aceptación al amor propio, hace que esa delgada línea se difumine, tan sólo haz la prueba, piensa en todas las cosas negativas de tu persona y observa cómo hay algunas que no necesariamente te causan problemas de autoestima, pues aprendiste a aceptarlas, ahora sólo tienes que intentarlo con aquellos aspectos negativos que sí te causan conflicto. 

¿Por qué es tan difícil tener buena autoestima?

Hoy en día vivimos en un mundo rodeado de cánones, estereotipos y modelos de todo tipo que idealizan formas de ser y de actuar para las personas, y cuando no encajamos en estos cánones (que no son más que invenciones sociales), tendemos a pensarlo como algo malo, lo cual nos puede producir inseguridades y baja autoestima. Tan sólo piensa en todos los estereotipos de belleza presentes en la publicidad, y medios de entretenimiento y comunicación que nos presentan un ideal que tiende a hacernos sentir inadecuados e insuficientes, bueno, este fenómeno ocurre con todo lo que puede caracterizar a un ser humano.

Nos vemos rodeados de mensajes que nos muestran cómo deberíamos de ser, a veces de forma irrealista, y al no identificarnos con dichos ideales tendemos a pensar que es por “defectos” de nuestra persona. Si te gustaría profundizar más sobre el tema, te invito a que leas mi ensayo “Obsesión con la imagen corporal”, que habla sobre por qué es que no deberíamos dejarnos guiar por nuestra cultura visual de la belleza.

Sin embargo, en esta ocasión no me enfocaré exclusivamente en la autoestima a nivel físico, por lo tanto me limitaré a responder la cuestión ¿Qué deberías hacer ante esto? ¿Cómo deberías reaccionar en un mundo donde la sociedad te bombardea de expectativas basadas en cánones que dicen cómo deberías de ser y de actuar, las cuales ocasionalmente son inalcanzables?

Bueno, debes crear tus propios cánones, en lugar de seguir la corriente y convertirte en lo que todos esperan que seas, ¿Por qué no comenzar a preguntarte qué es lo que tú quieres en verdad? Si tus problemas de autoestima se relacionan con contextos sociales que posiblemente no se pueden cambiar, comienza a crear tus propios modelos internos de cómo ser y actuar, y síguelos, deja de preocuparte por lo que los demás esperan de ti, y sólo sé tú, tal vez descubras que esas características negativas de tu persona no son defectos después de todo, tal vez sólo los estabas observando desde la perspectiva equivocada. 

Enaltece tus virtudes y trabaja en tus defectos:

Tener buena autoestima puede ser difícil porque implica aceptar y amar los aspectos negativos de nosotros mismos, sin embargo, eso no es todo, pues cuando nos enfrentamos al reto de aceptar y amar lo negativo, también tenemos problemas para amar lo positivo de nosotros mismos.

Podrá parecer extraño, porque ¿Por qué sería difícil amar lo bueno de nosotros? Bueno, esto se debe a que cuando nos enfrentamos a lo negativo, terminamos perdiendo de vista lo positivo, y cuando esto sucede también lo olvidamos. Tal vez eso explicaría por qué tenemos baja autoestima, porque cuando somos incapaces de aceptar y amar lo malo como lo hacemos con lo bueno, nos obsesionamos con lo malo, pareciera que no hay nada bueno con nosotros mismos, y nos sentimos terrible por eso. 

Así que primero acepta que tener defectos es completamente normal, no se supone que no tengas ninguno, pues es lo que te hace un ser humano, por ello debes aceptarlos y una vez que los aceptes te podrás amar incluso con ellos, pues al no estar obsesionado con tus defectos, también podrás ver tus virtudes, las cuales debes enaltecer del mismo modo en el que enalteces tus defectos (cosa que por cierto, deberías dejar de hacer, recuerda que aceptar tus defectos es estar en paz con ellos, pero no significa que no puedas trabajar en ellos). 

Ámate a ti mismo(a):

Sé que lo has escuchado infinidad de veces, pero: Ámate a ti mismo(a), realmente puedes hacerlo, no es algo imposible, habrá días en los que te vas a querer, y otros en los que no te querrás, pero al final, siempre y cuando recuerdes hacer las paces con tu lado negativo, trabajando en el mismo, y dándole más importancia a todo lo bueno que hay en ti vas a comenzar a tener una mejor autoestima. Después de todo, estoy segura de que tienes muchas razones para amarte a ti mismo, aunque a veces te cueste trabajo verlas. 

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¿Cómo sobrevivir a tus emociones y sentimientos?

Consejos para lidiar con el estrés

Introducción:

La clave para combatir con el estrés no es mantener la tensión hasta que el problema se vaya, sino soltarla mientras este se soluciona. Cuando se nos presenta el estrés tenemos dos opciones: Dejar que este nos haga sentir mal, o controlarlo; generalmente tenemos estrés como producto de un problema, ¿Y qué caracteriza un problema? Que tiene solución, aunque esta no sea evidente, o se vea poco viable, y cuando la solución no se presenta de forma inmediata y el problema amenaza con permanecer por más tiempo es que se produce el estrés.

Una cosa que necesitamos comprender es que todos los problemas requieren de tiempo para solucionarse, así que ¿Qué pasa durante ese lapso de tiempo? ¿Qué podemos hacer? Como dije anteriormente tenemos la opción de dejar que nos haga sentir mal, que no es más que sentirnos estresados, y todos sabemos que es una sensación desagradable, y desafortunadamente a veces el permitirnos sentir estrés resulta ser contraproducente.

¿A qué me refiero con esto? Piensa en tu estrés como un obstáculo que te impide ver las posibles soluciones a tu problema, cuando no las puedes ver, no las puedes aplicar, y por ende el problema tiende a alargarse. Por el contrario, podemos controlar el estrés, y por consiguiente sacar provecho productivamente de nuestro tiempo, ya que al estar relajados podemos ver las soluciones a nuestros problemas, y así aplicarlas para librarnos del problema en el menor tiempo posible. 

Es por todo lo anterior que inicialmente mencioné que la clave para combatir el estrés es soltar la tensión mientras resolvemos el problema, no estar tensos y sintiéndonos mal hasta que el problema se haya resuelto, pues esto último podría alargar el problema, o simple y sencillamente afectarnos física y psicológicamente, ya que no hay que olvidar que el estrés tiene repercusiones negativas en la salud. 

Acepta los estímulos estresantes:

¿Alguna vez has escuchado hablar de la ley de Murphy? Esta es una ley que básicamente dice: “Si algo puede salir mal, va a salir mal”, esto a simple vista podrá sonar deprimente, melancólico, y pareciera que nos da a entender que en la vida hay que ser negativos, resignarnos a las cosas negativas, y sobre todo, no esforzarnos por alcanzar nuestros objetivos, pues si existe la posibilidad de que las cosas nos salgan mal, y sólo por eso van a salir mal, entonces, ¿Para qué molestarse? 

Esto si nos quedamos con esta simple interpretación del enunciado, pero ¿Qué pasaría si te dijera que ésta aparentemente negativa ley puede ayudarte en la vida? Sólo hay que verla desde otra perspectiva: “Si algo puede salir mal, va a salir mal”, ¿Qué tal si lo que nos quisiera decir en realidad es que hay que aceptar los estímulos estresantes?

Comencemos por explicar el estímulo estresante, un estímulo estresante se podría definir en palabras sencillas como cualquier causa de estrés, es lo que lo provoca. Como te comenté en mi entrada ¿Cómo tener pensamientos positivos? Debemos aceptar el hecho de que nada es perfecto, en cualquier momento pueden suceder cosas negativas, y hay que aceptar dichas cosas negativas sin resignarnos a las mismas, es decir: Cuando pase algo malo, no te angusties, acéptalo, y recuerda que el aceptar las cosas es simplemente sentirte en paz con la situación, no resignarte a que las cosas continúen así; por lo que lo siguiente que debes hacer es concentrarte en cómo puedes resolver el problema que se te presentó para mejorar tu situación. 

Entonces, volviendo a la ley de Murphy: “Si algo puede salir mal, va a salir mal”, puede entenderse simplemente como aceptar que hay cosas que pueden salir mal, y ocasionalmente van a salir mal, sin embargo, esto no quiere decir que debamos resignarnos a que las situaciones se mantengan negativas, puesto que siempre podemos encontrar la forma de resolver los problemas que se nos presenten, siempre y cuando soltemos la tensión para ver nuestras posibles soluciones y controlemos el estrés en vez de dejar que éste nos controle. 

Usa el estímulo estresante a tu favor:

Siempre que puedas identificar tu estímulo estresante, vas a tener una ventaja sobre tu situación: Sólo piénsalo, si sabes cuál es la causa de algo, por consecuencia estás en posibilidades de saber también cuál es la solución. Imaginemos que cuidamos de una planta, pero está se comienza a secar, si no sabemos porqué se seca es poco probable que la podamos salvar, en cambio, si sabemos que es por ejemplo por falta de agua o exceso de sol, podemos regarla o ponerla más tiempo en la sombra para que se recupere.

Aprende a relajarte y dominarás la situación:

Ya que tenemos clara la importancia aceptar lo negativo sin resignarnos y soltar la tensión mientras el problema se resuelve y no solo hasta que se resuelva, vayamos a otro aspecto importante, el cual es la relajación, la relajación es el antónimo del estrés, y obviamente sabemos que cuando el estrés está presente parece sumamente difícil o incluso imposible la idea de relajarse en semejante circunstancia, así que ¿Por qué propongo que te relajes antes a sabiendas de esto?

Bueno, para explicarlo me gustaría usar un ejemplo personal: Solía darme mucho miedo el agua, así que nunca me quise meter a a albercas ni nadar por esa misma razón, no fue hasta que cumplí diecisiete años y quise superar ese miedo cuando finalmente fui a clases de natación y aprendí a nadar, al principio me costó mucho trabajo, pero no fue por falta de capacidad o de habilidad ¿Sabes por qué fue? Por el estrés y la ansiedad.

Al principio me entraba agua por la nariz y la boca constantemente, me hundía y me costaba trabajo flotar y desplazarme a través del agua, esto ocurría porque resulta que en la natación si tú cuerpo está tenso terminas hundiéndote, no es hasta que te relajas que comienzas a flotar, y una vez que por fin controlé mi estrés y ansiedad para comenzar a relajarme cuando me di cuenta de que no tenía que hacer nada más que eso para poder flotar, y que nadar era mucho más sencillo de lo que en un principio parecía. Se podría decir que lo mismo sucede con todas las demás situaciones, tienes que relajarte para que las cosas te salgan bien, o de lo contrario te hundirás.

Conclusión:

Vas a tener problemas y a enfrentarte a situaciones negativas muy posiblemente durante todos los días de cada día de tu vida, nada será perfecto, y no puedes esperar que así lo sea; cuando te encuentres ante un problema te vas a comenzar a estresar y eso te impedirá ver cómo solucionarlo e incluso podría alargar la situación, por lo que tienes que aprender a aceptar la situación sin resignarte, a relajarte y a dominar tu estrés antes de que tu estrés te domine a ti.